
Credit: Michael Mazzamuto/Flickr/Creative Commons
English version: Every step I take
31 Entonces, ¿qué diremos a esto? Si Dios está por nosotros, ¿quién estará contra nosotros? (Romanos 8:31 NBLH)
Es tan importante recordarme a mí mismo que Dios está siempre de mi lado y conmigo en todo lo que hago en todo lo que enfrento. Dios lleva el peso más grande y la autoridad en todo lo referente a mi vida.
Cuando la balanza de mi vida se desiguala, sé que Dios esta justo a mi lado. Cuento con su presencia y su autoridad para inclinar la balanza a mi favor y resolver todo por mi bien.
El rey David entendió esto y toda su vida lavivió por la creencia de lo que Dios era para él.
El Señor está a mi favor; no temeré.
¿Qué puede hacerme el hombre? (Salmo 118: 6 NBLH)
Estoy aprendiendo a armarme de la misma manera que Josué lo hizo. Consciente de la presencia y la autoridad de Dios que llevaba en cada paso que daba en la tierra que Dios prometió a Israel.
Estas fueron las palabras de gran alcance que se hablaron a Josué:
3 Todo lugar que pise la planta de tu pie te será dado, tal como dije a Moisés.
6 Sé fuerte y valiente, porque tú darás a este pueblo posesión de la tierra que juré a sus padres que les daría. (Josué 1: 3, 6 NBLH)
Las personas que lograron grandes cosas para Dios tenian una característica común – Creían que Dios estaba de parte de ellos.
Cuando siento la duda o el miedo, visualizo a Dios, caminando conmigo, paso a paso. Él pone su pie en el suelo y camina conmigo a través de mi día – en medio de mis ensayos y mis pruebas.
El Señor está conmigo en los buenos tiempos, malos tiempos, en los valles y en las cimas de las montañas.
Reconociendo que todo el peso de la presencia y la autoridad de Dios está en todos mis pasos me ha cambiado la percepción de Dios.
Sin embargo, hay ocasiones en que mi confianza y mi fé tiemblar. Esto significa que tengo que salir ce mi zona de confort. Intentar otra vez, donde he fallado en el pasado o tratar algo nrer o que no he hecho antes. Hocerle frente a un desafio inesperado.
Teremos que reclamar este territorio en nuestres vidas. Hay circunstancias inesperadas y a veces difíciles que nos sacuden.
Podemos temblar, pero el suelo bajo nuestros pies también tiembla cuando comenzamos a entender la presencia, el poder y la autoridad de Dios que está en nosotros y con nosotros en cada paso de nuestro viaje por la vida.
Ahora, el siguiente paso que es vital es creer em la presencia y la autoridad de Dios em nueitres vidas. — EZ